domingo, julio 01, 2007

Un cristal pulido


Lo encontré en la playa. Un pequeño pedazo de cristal que el tiempo había ido puliendo de tal forma, que su superficie y costados eran igualmente suaves. Lo que una vez fueron puntas cortantes, habían sido limadas. Tiene un color interesante mi cristal. No el verde de la botella de cerveza rota y olvidada, sino el tono que toma el mar tranquilo cuando el cielo está claro. Un hermoso color turquesa intenso pero sereno. Hubiera pasado desapercibido entre los miles de caracoles y objetos que la marea había dejado depositados en la orilla, excepto en que en el momento que pasaba, un rayo de sol lo hizo brillar.

Ya en mi mano, recordé cuando de niña mi padre nos llevaba a la playa y recogíamos caracoles, en una competencia por cuál de nosotras conseguía el más grande, el más hermoso. Más tarde, no importaba quién; en el automóvil en el viaje de regreso, molestas por la pegajosidad de la ropa mojada, cansadas por el ejercicio, y con el olor a mar adherido a nuestros cuerpos, nos poníamos impertinentes y recordábamos el caracol al llegar a la casa, cuando yo lo guardaba en mi caja de recuerdos. Desde pequeña tuve esta extraña compulsión por guardar todo aquello que me recordara algún incidente u ocasión que pensaba importante.

Hoy no quedan caracoles en mi caja de recuerdos. Los tiré cuando escuché a alguien decir que traen mala suerte, y de esa no necesitaba, que tal parecía que desde pequeña abría la sombrilla dentro de la casa. En la caja guardo otros objetos, papeles, tarjetas, cartas, flores secas, fotos. Recuerdos del pasado...

Regreso al presente, y miro atrás. Al camino recorrido hasta llegar al lugar a dónde un rayo de sol acariciando un cristal me atrajo. Y siento la irreprimible necesidad de regresar a mi hogar. Voy directo a la caja de recuerdos, y sin pensarlo, lanzo el contenido a la basura. En la caja, por ahora, sólo quiero tener un cristal de color intenso, sereno, cristal pulido de asperezas por el tiempo, y la resaca de la mar, cristal que me hace pensar hacia dónde voy en el continuo proceso de crecer y cambiar, en el ir y venir de la vida, en la constante búsqueda de mi YO.

No hay comentarios.: