jueves, junio 04, 2009

Amándolo

En ocasiones siente sus brazos que protectores le rodean la espalda. Toda ella florece de amor, y un cosquilleo, grata sensación de plenitud, la envuelve. Se regodea en el sentir de sus manos, en el olor que emana de su cuerpo cuando están juntos, mezcla de sudor, de saliva y aceites de eucalipto y almendra. Siente su aliento en el cuello y el roce de sus labios en la piel e involuntariamente su cuerpo se arquea buscándolo. Mantiene sus ojos cerrados para que la luz del sol que irrumpe por la ventana abierta no rompa el hechizo haciendo que el espejismo se esfume.

3 comentarios:

Silvia Giordano dijo...

Rose: Azules Naranjas está ternado para mejor blog literario en www.escobarlarevistapremia.blogspot.com
Para conocer las bases, traer el enlace para que todos los que te visiten puedan entrar y votar ingresa a esa página o a cualquiera de mis blogs que tengo en todos colgado un enlace.

Besos!!!

Carol dijo...

Sentir unos brazos protectores alrededor de nuestro cuerpo es una de las sensaciones más placenteras que existen.

Que no se esfume el espejismo...no abriremos los ojos.

Besos, Margret.

Carol dijo...

Margret, en mi blog tienes dos regalos, si los deseas para a recogerlos, encantada de compartirlos contigo.

Un fuerte abrazo, amiga.