lunes, marzo 02, 2009

Fantasías

No estés triste, me digo, realmente no vale la pena. Y es cierto, no lo vale. Cuando las cosas no tienen solución se echan en la bolsa de casos imposibles, y se deja que las olas del mar la alejen de la playa.

La llevarán tan lejos como arrastraron a los barcos de papel cargaditos de sueños que construí de niña. Allá, muy lejos, perdidos en la bruma, en la isla de ensueños inventada, se encuentran y chocan y el crujir de las velas interrumpe mi noche. Entonces me consuela pensar que un día yo también, fantasía de hada, iré a morar con ellos.

2 comentarios:

lucille lang correa dijo...

me encanto, breve y completo.
sigue escribiendo...

Silvia Giordano dijo...

De verdad, angustiarse por lo imposible, es perder el tiempo...Peo igual nos pasa.
Besos